Fantasma asesino.

En Londres existe un famoso asesino, pero no se trata de un asesino común, es un espectro conocido como el fantasma de Berkeley o el fantasma asesino y sabiendo que no puede ser atrapado por la policía y menos juzgado, viene haciendo de las suyas y llena de terror a sus víctimas.

Este asesino del más allá, existió en el siglo XIX y tiene dirección propia en la ciudad de Londres, algunos investigadores se han encontraron con la ingrata sorpresa que pocos testigos han sobrevivido al fantasma asesino.

Los pocos sobrevivientes no querían ni siquiera hablar de la mala experiencia vivida, por lo cual no existen muchos datos de cómo era este fantasma.

Una de sus víctimas más recordadas fue un aristocrático caballero llamado Robert Warboys, quien sintiéndose con valor suficiente, tomó la decisión de enfrentar al fantasma y pasar una noche en la casa donde aparecía.

La única precaución que tomó, fue llevar un arma cargada consigo, haciendo caso al consejo de sus amigos, quienes se negaron a pasar con él una noche en la casa del fantasma.

En el segundo piso se instaló cómodamente Warboys, mientras que en la primera planta descansaba el propietario del inmueble y otra persona más.

Nadie sabe qué pasó exactamente esa noche, pero pasadas las doce, un fuerte disparo terminó con la tranquilidad , al subir a ver lo que sucedía, atónitos observaron el cuerpo de Warboys muerto y en su rostro se dibujaba una expresión terrorífica.

Revisaron el cuerpo pero no tenía ninguna herida de bala, llegaron a la conclusión que había muerto de miedo, que forma tendría el fantasma? Nadie lo sabe, solo que bastaba verlo para morir de terror.

Otras víctimas del espectro asesino, están huéspedes que fueron encontrados muertos y solo alguno que sobrevivió puedo narrar que logró ver una sombra acercándose a la habitación, un ente que no permite ningún intruso en lo que considera su territorio.

Actualmente en la casa del espectro asesino, funciona una librería y todo parece transcurrir de manera normal, aunque algunos tienen miedo que el fantasma se encuentre descansando y pronto inicie de nuevo su misteriosa forma de acabar con los intrusos.